En el Día Mundial del Saneamiento Aguas de León quiere concienciar a la ciudadanía de la importancia de realizar una gestión sostenible y avanzada de la red de alcantarillado, así como de hacer un buen uso de ella para conseguir unas infraestructuras de saneamiento más resilientes a los impactos del cambio climático.

Gestionar de forma sostenible 405.000 metros de red, 14.275 acometidas, 11.739 pozos de registro y 14.481 imbornales, que, entre otros elementos, componen las infraestructuras de saneamiento de la capital leonesa es uno de los retos que tiene Aguas de León.

Hoy, Día Mundial del Saneamiento, la sociedad mixta quiere poner en valor como lo está superando. Tecnología, digitalización, y sostenibilidad junto con el modelo de colaboración público-privada que impulsa de la mano del Ayuntamiento de León, constituyen sus claves para conseguir que toda la infraestructura que existe en el subsuelo de la ciudad sea más resiliente a los impactos del cambio climático.

Y es que, desde su nacimiento en 2010 hasta la actualidad, la sociedad mixta Aguas de León ha mantenido una apuesta tecnológica para implementar la gestión de los sistemas de saneamiento y abastecimiento que gestiona en la capital leonesa.

“La digitalización ha sido un elemento estratégico si hablamos de la gestión avanzada de las infraestructuras de saneamiento”, afirma Manuel Salas, gerente de Aguas de León. Ejemplo de ello fue la implementación en 2020 del sistema GALIA, una solución tecnológica que permite gestionar de manera unificada, ágil y centralizada toda la información de la actividad de la red de alcantarillado de la ciudad.  Se trata de una tecnología avanzada para organizar los trabajos de inspección, limpieza y mantenimiento del alcantarillado que permite determinar dónde es necesario limpiar, cuándo y con qué frecuencia mediante el análisis de los datos reales recogidos en campo por parte de los operarios y tratados en las tablets que llevan los operarios de Aguas León.

A través soluciones digitales como GALIA “logramos incrementar la resiliencia de las infraestructuras de saneamiento tanto al paso del tiempo como a los efectos del cambio climático- uno de los principales retos actuales que tenemos como sociedad-, algo que, sin duda, nos permite impulsar junto al Ayuntamiento un modelo de ciudad inteligente y sostenible, tal y como establece el ODS número 11, Ciudades y Comunidades Sostenibles”, detalla el gerente de la sociedad mixta.

Pero la tecnología no acaba aquí. El salto tecnológico también se ha dado a la hora de ejecutar todos los trabajos de inspección de la red de saneamiento.

Aguas de León dispone de dos cámaras de televisión que permiten inspeccionar el interior de las redes de saneamiento aportando una mayor precisión en la valoración y el diagnóstico (localización de roturas y atascos), reforzando la seguridad del operario, ya que no es necesario que se introduzca en las instalaciones y ofreciendo datos e imágenes pormenorizadas para la elaboración de informes detallados.

Esta inspección digitalizada se complementa con las labores tradicionales de supervisión de la red que realizan los operarios de Aguas de León durante todo el año.

De lineal a circular: limpieza de la red de saneamiento de la ciudad

La limpieza de la red de saneamiento de la ciudad también ha evolucionado hacia un modelo más verde, fruto de la apuesta de Aguas de León por el Desarrollo Sostenible.

Al camión CIS impulsor succionador convencional que ya formaba parte de la flota de Aguas de León, en 2020 se sumó un nuevo camión CIS impulsor-succionador que reutiliza las propias aguas del alcantarillado, que, una vez filtradas y separadas de los sólidos y lodos que contienen, se vuelven a utilizar por la impulsión de agua a presión para la limpieza del alcantarillado.

Este vehículo es de última generación y contó con una inversión de 480.000 euros. A través de él, el Ayuntamiento de León y Aguas de León impulsan el modelo de economía circular: “el nuevo camión permite un ahorro diario de 25.000 litros de agua, minimizando de esta manera la necesidad de aguas exterior para el sistema de limpieza de alcantarillado y reduciendo los desplazamientos”, destaca Manuel Salas.

A estos trabajos se suma la limpieza a diaria de la red de sumideros de la ciudad de León, unas labores que se intensifican en época de lluvias, haciendo hincapié en las zonas más conflictivas para minimizar el riesgo de inundaciones.

Aguas de León cierra el círculo de la sostenibilidad con el reciclaje de todos los residuos que se obtienen en las labores de limpieza de la red.  Así, éstos son trasladados diariamente a la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) de la Mancomunidad de León y su Alfoz para su posterior tratamiento.